REFLEXIONES
Algunas reflexiones sobre la práctica docente.
Durante casi treinta años he venido realizando el trabajo que
decidí, desde estudiante, abrazar como profesión y como sustento de mi familia.
Estos años no han sido fáciles, al contrario, han permitido aprender
de manera constante y en ocasiones rudamente. Tener una profesión con un peso
social permanente, no es fácil, sin embargo al momento de titularse como
maestro normalista, se ha podido conocer diferentes contextos sociales,
familias diversas, alumnos sin igual, aprendizajes y necesidades distintas.
Zonas rurales y zonas conurbadas en situaciones muy marcadas.
Sin embargo el alma y la conciencia siempre dictan que el deber es
primero y se trata siempre de buscar soluciones a todos los problemas que
enfrentamos diariamente. Alumnos que rezagan su aprendizaje por mil motivos,
desnutrición, abandono, pobreza, desintegración familiar, alcoholismo, etc.,
son algunos temas que siempre están incluidos en nuestra agenda y nuestro
andar.
Profesionalizarse es una necesidad
porque se reconocen las limitaciones y falta de actualización. El tiempo no perdona, alcanza
y rebaza en conocimientos y tecnologías, el docente atiende a generaciones que
en las últimas dos décadas se disparan en diferencias muy marcadas por los
tiempos que se viven a nivel global.
El maestro debe alcanzar esos tiempos y más aún, adelantarse para
que sus alumnos le entiendan y comprendan. El maestro olvida en ocasiones a su
propia familia, los hijos protestan porque es poco el tiempo que se les dedica,
se piensa más en los alumnos rezagados
que en la fiesta de cumpleaños del más chico de los hijos. La familia señala
que la quincena no alcanza para comprar lo que se desea, sólo en diciembre, con
el aguinaldo se puede comprar por única ocasión lo que se anhela.
Sin embargo, se debe centrar la reflexión en la importancia de
alcanzar mejores niveles escolares a partir de las tecnologías y de las
Reformas impuestas.
En lo personal, el compromiso ha sido y seguirá siendo el
continuar dando lo mejor a cada uno de los alumnos atendidos. Como docente,
seguirá siendo ésta la razón de mi labor, el compromiso por lograr que cada
alumno alcance una mejor calidad de vida y mejores oportunidades. Hoy es posible
darles seguimiento, saber de ellos de manera permanente en las redes sociales, apoyarlos,
guiarlos y motivarlos para seguir adelante en sus sueños y sus objetivos.
MANUEL ALBERTO AGUILAR BURGOS.
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